Actividad y Tarea S2
1. Copiar en el cuaderno la teoría sobre HECHOS Y OPINIONES que se encuentra al final de esta página.
2. Ver el video titulado: DIFERENCIA ENTRE HECHOS Y OPINIONES, y contestar en el cuaderno las siguientes preguntas:
a) ¿Qué es un hecho?
b) ¿Qué es una opinión?
c) En la vida real, ¿Cómo puedes distinguir la una de la otra?
d) Escribe una lista de 10 hechos sobre ti mismo que la gente puede ver.
e) Escribe una lista de 10 opiniones que la gente ha expresado sobre ti. Pueden ser positivas o negativas.
f) ¿Puedes enojarte cuando las personas expresan hechos sobre ti?
g) ¿Cómo puedes reaccionar cuando las personas expresan opiniones negativas sobre ti?
TEORÍA SOBRE HECHOS Y OPINIONES
¿CÓMO DIFERENCIAR UN HECHO DE UNA OPINIÓN?
En la vida diaria las personas están en constante interacción con su entorno, a través de las redes sociales, la participación en la comunidad, medios de comunicación, etc. De esta manera, el individuo se va formando un juicio o concepto de todo lo que lo rodea.
Para poder diferenciar qué es realmente un hecho de lo que es una opinión, es clave partir de las definiciones de estos dos conceptos.
Hecho: se puede comprobar; es decir, se puede verificar que ocurrió en tal lugar, a tal hora, con tales personas involucradas y trajo tales consecuencias. Un hecho es algo completamente real, comprobable y objetivo.
Opinión: es un pensamiento sobre algo, ya sea sobre un hecho, una persona, cosa o lugar. Ese pensamiento o idea se entrega con argumentos, los cuales pueden cambiar con el tiempo.
¿POR QUÉ ES IMPORTANTE DISTINGUIR LOS HECHOS DE LAS OPINIONES?
Trabajamos sobre este tema, ´porque distinguir entre hechos y opiniones es fundamental para comprender mejor la información que recibimos, ya que nos permite separar la realidad de las interpretaciones o pensamientos personales.
Identificar hechos y opiniones fomenta el pensamiento crítico, ya que nos permite evaluar la información de forma objetiva y cuestionar las afirmaciones, lo que nos ayudará a identificar la verdad de la fantasía y de los pensamientos ajenos.
La capacidad de diferenciar entre hechos y opiniones nos protege de la propaganda y la desinformación, permitiéndonos identificar argumentos basados en creencias personales en lugar de evidencia, ayudándonos a evitar la manipulación de las personas mal intencionadas.